Hoy en el blog de Sara quiero recomendar la letra de una canción de un músico y compositor al que todos conocéis, Jorge Drexler (Montevideo, Uruguay, 1964). Pertenece a su álbum Eco. Había escuchado la canción algunas veces, pero alguien muy especial hace poco, al cantarla, me hizo atender a su texto, que merece un análisis en el aula. Porque el extraordinario hallazgo de Drexler reside en conseguir un profundo lirismo a través de dos recursos: primero, mediante la sucesión de planos temporales, marcados por las formas temporales de los verbos, que lanzan al presente (“copa que gira en mi mano”), al pasado más próximo (“mientras el vino caía”) y al más remoto (“donde hicieron mi zapato/ sobre el que caería el vino”) y finalmente al futuro en diálogo con el pasado (“Zapato que en unas horas/ buscaré bajo tu cama” (…) junto a tus sandalias planas/que compraste aquella vez”); esa acumulación de referentes temporales, impulsada de forma inteligente con los adverbios (luego/mientras) consigue crear el efecto de un tiempo circular, y finalmente, de un no-tiempo. Y por otro lado, a través de un juego de zoom, donde los elementos de la naturaleza (“viento”/”aspa”/”pisar el vino”, “galaxia”) agrandan las cosas hacia fuera, hacia lo telúrico e inmenso, en un aumento de la lente de vocación panteísta, y los elementos mínimos, de detalle, de fragmento -más cercanos a lo físico o tangible- (“gota se sudor”/“boca roja en la mía”/ “euro italiano”/ “zapato/ sobre el que caería el vino” /“sandalias planas”) disminuyen el foco. Su combinación, al entrecruzarse, permite palpar el efecto de que las cosas más nobles del hombre (el amor, y la generosidad de darlo, y la entrega y respeto al recibirlo) confluyen con la naturaleza misma, se entreveran y confunden.
Puedes acompañar con música la letra en: http://www.youtube.com/watch?v=mbTqqtS6D6g
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